Siempre fui bastante melómano, desde muy joven, aunque el acceso a la música estaba en función a lo que había en casa, lo que amigos de mis padres me hacían llegar o lo que el azar simplemente me deparara. Hasta que bueno, como en muchos casos pasa un día que te cruzas con algo que te sorprende y sigues buscando más. Entre esas cosas que me sorprendieron están las bandas peruanas, sobre todo El Aire y Voz Propia. Recuerdo haberlas visto en vivo a mediados de los noventas y me sorprendí de saber que se podía ver a estas bandas en Lima. Así que desde entonces empecé a investigar más y asistir a conciertos. Por alguna razón que nunca podré explicar, siempre me llamaron la atención las bandas o artistas que se alejaran del sonido convencional del rock, no sé, imagino que porque desde muy joven, diría que de muy niño y por cosas de la vida, por amigos de mi mamá, me acostumbré a escuchar música instrumental, muchas bandas sonoras, que era lo que había en casa. No sé… de pronto había una caja con discografías de Kitaro o Vangelis o cosas así. Yo escuchaba mucho eso, de modo que digamos, mis gustos iniciales por la música no fueran precisamente rockeros, de hecho cuando escuchaba rock estaba más preocupado por hallar justamente esos momentos instrumentales, pues era eso lo que me atraía. También me gustaba mucho el rock argentino y recuerdo que Invisible fue algo que me generó una revolución mental. Así de un momento a otro fue que descubrí el rock progresivo, las bandas de psicodelia y cosas así de las que me volví muy fan. Creo que en ese sentido ver a El Aire de adolescente fue una experiencia que me marcó pues sentía que era el tipo de música que me interesaba. 

Imagino que mi acceso a la música local fue justamente a través de la radio y la televisión, sobre todo en la tele pues en el canal 33 y el 27 había programas que difundían rock peruano, eso en los noventas. En la radio recuerdo algunos programas también donde se pasaban muchas novedades de las bandas que iban aparecieron también en esa década.

Pues la idea de hacer los Buh Fest fue por varios motivos. El principal era dar continuidad, estaba harto de que la música experimental sea algo que se presentara una vez al año en el contexto de un “evento de música experimental”, yo me preguntaba por qué no pueden hacerse conciertos todas las semanas como lo hacen las bandas de rock, por qué tiene que esperarse encontrar la casona, el acontecimiento, el festival, no sé. Entonces empecé a organizar conciertos en bares y locales diversos, a reunir bandas y artistas que me interesaban, de música experimental, de psicodelia, noise, pop, etc. La idea siempre era convocar artistas que de alguna manera sintonizaran con cierto espíritu detrás del sello, quizá porque todos tienen un perfil muy personal. 

Así de editar discos he pasado a hacer muchos conciertos, mensualmente, siendo tal la cantidad de artistas que he empezado a dividir las fechas. Hay unas dedicadas al ruidismo y a la experimentación, otras dedicadas a la improvisación libre, otras dedicadas al rock experimental y los grupos de pop. Hay veces en que todo se mezcla también felizmente.

Pues digamos que soy un melómano que ha decidido hacer de su afición una forma de vida y como tal, día a día pienso siempre en qué más puedo hacer. La escena limeña es muy estimulante y la tradición musical peruana realmente alucinante. Es difícil eso sí, las bandas a veces no tienen tiempo para hacer todo lo que se puede hacer. Yo de hecho trato de sacar adelante los proyectos que tenemos con las bandas que manejo, a veces me gustaría hacer más cosas pero los recursos tienen límites y uno tiene que ingeniárselas para poder mantenerse. Sino persistes no logras nada y es muy fácil caerse y desanimarse. Yo básicamente me encargo de organizar conciertos, editar discos, ayudarles con la prensa, conversar mucho con las bandas y ayudarlos en general en todo lo que pueda, les planteo que si trabajamos bastante se pueden lograr cosas. Yo tengo mucha fe y mucho entusiasmo con las bandas con las que trabajo y creo que compartir eso con ellos y comprometerme es algo que hace que esto funcione, de otro lado lo que me interesa mucho es generar lazos, y por eso me interesa mucho la improvisación libre, me gusta juntar a músicos de muchas procedencias y hacerlos que toquen, muchas bandas en Lima se han formado luego a partir de esos conciertos de improvisación. Y también me interesa conectar a las bandas de Perú con las bandas internacionales, sobre todo con las de Latinoamérica. 

Cazar Truenos es mi proyecto de radio, ahí vamos con más de 100 programas emitidos cada miércoles a la medianoche través de radio Filarmonía. El programa está dedicado a la música experimental a los sonidos contemporáneos. He hecho muchos programas monográficos, muchas entrevistas, especiales, todo está colgado en la web también, muchos de esos programas especiales que he hecho espero pronto editarlos en edición de CD, en especial el de poesía sonora, espero pronto hacer la edición.